17 de Junio de 2009 Jesús estaba sentado en silencio y llorando. Le pregunté si se encontraba mal, pero me dijo que no, el médico le había dicho que sus tumores habían desaparecido. Estaba llorando de felicidad. ¡Que noticias tan maravillosas!
Copy and paste this URL into your WordPress site to embed
Copy and paste this code into your site to embed